Prevención y tratamiento de las caídas
hace 2 años · Actualizado hace 10 meses
Los terapeutas ocupacionales jugamos un papel importante tanto en la prevención como en la rehabilitación de las personas mayores tras una caída.
Prevención
Es por eso que, cuando hablamos de prevención de caídas en el adulto mayor planteamos una serie de recomendaciones a tener cuenta:
- Utilizar calzado adecuado con suela firme y no deslizante.
- Adaptar el entorno. Aquí hablamos de:
- Quitar muebles que obstaculicen el desplazamiento dentro de la vivienda.
- Tener una buena iluminación.
- Si es posible, poner barras de apoyo en el cuarto de baño, en el pasillo y/o habitación.
- Quitar alfombras.
- Evitar los suelos resbaladizos/encerados.
- Colocar la cama y mobiliario, en general, a una altura adecuada.
- Utilizar superficies que sean antideslizantes.
- Realizar ejercicio físico. Es fundamental mantenernos activos haciendo actividades como gimnasia, natación, caminar al aire libre, etc. (siempre controlado y/o supervisado cuando se trata, especialmente, de personas mayores)
- Utilizar productos de apoyo (andadores, bastones, asideros, etc.)
- Nota: No está recomendado en todos los casos. Es importante hacer una valoración previa de la persona. Se conocen estudios en los que, más que una ayuda, se han convertido en un factor de riesgo.
- Llevar una dieta equilibrada.
- Vigilancia en la toma de medicación. Acudir al médico de cabecera o especialista sanitario antes de automedicarse. Debemos recordar que cada organismo responde de forma diferente a los medicamentos.
- Acudir, en la medida de lo posible, a charlas relacionadas con la educación y promoción de la salud.
Tratamiento tras la caída de una persona mayor
Desde la terapia ocupacional nos centramos en el fortalecimiento del aparato locomotor. Para ello desarrollamos actividades que ayudan a potenciar la fuerza de los músculos así como el movimiento de las articulaciones. ¿El objetivo? Conseguir su mayor amplitud, siempre por supuesto, teniendo en cuenta las limitaciones físicas que tenga la persona mayor en ese momento.
Fomentamos la realización de ejercicios repetitivos donde la coordinación visual junto con el movimiento motor juega un papel fundamental.
Recordemos que uno de los factores de riesgo es la disminución de la agudeza visual, por tanto intentamos potenciar la función ocular con el fin de corregir los problemas ópticos que puedan surgir, reduciendo así las posibilidades de una nueva caída.
En resumen, podemos decir que el tratamiento de las caídas, haya o no fractura, va dirigida siempre a recuperar la máxima autonomía posible de la persona, con el fin de que pueda seguir realizando sus actividades de la vida diaria.
Además, también nos enfocamos en:
Aquí podrás ver los aspectos que tenemos en cuenta como terapeutas ocupacionales a la hora de valorar a una persona que ha sufrido o que puede sufrir una caída.
Leer sobre:
Referencias bibliográficas
– Durante Molina, P. (2010) Alteraciones de la marcha, caídas y accidentes. En Terapia Ocupacional en Geriatría. Principios y práctica (pp. 155- 176) Masson:Barcelona.
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